En nuestra casa les encanta subir a Guadalupe. Cuando subimos en coche, con poco tiempo, además de visitar la ermita y corretear por las campas, lo que les gusta es dar la vuela al fuerte por el exterior. Es una vuelta muy sencilla que descubrimos hace poco tiempo .

Primero se pueden desfogar un rato corriendo por las campas de arriba y al acercarnos al fuerte, en vez de ir hacia la puerta, tomamos la otra dirección. Tras las últimas mesas de pícnic comienza un camino estrecho que rodea todo el fuerte. En muchos tramos se va en fila india.


Es un camino agradable porque vamos viendo el fuerte desde otra perspectiva. Es un paseo sencillo y corto. Solemos tardar en dar la vuelta entera unos 20 minutos. Con un bebé en mochila se hace perfectamente, pero no es un camino de cemento en el que podamos meter una silla.


Cuando acabamos la vuelta entera, les suele gustar ir hasta la puerta del fuerte.


Y listo, de vuelta al coche. Misión cumplida.

Sabemos que no es un plan espectacular pero si una oportunidad de tomar aire y pasar un rato agradable en familia. Cuando sean un poco más mayores tenemos pendiente apuntarnos a una visita guiada del fuerte, de las que organiza Arma Plaza. La siguiente imagen está enlazada a Google Maps, por si os hace falta.
